La Catedral de los Reyes: Notre Dame de París
La Catedral gótica más famosa del mundo
La Catedral de Notre Dame de París es famosa por ser una de las más bellas y armoniosas construcciones góticas de toda Francia. Símbolo e icono parisino, se distingue por su inconfundible fachada cerrada entre dos altas torres y por su estilo gótico, considerado uno de los prototipos de la arquitectura de aquel tiempo. De hecho, probablemente ha sido una de las primeras construcciones del mundo que utilizó los arcos arbotantes, que con el tiempo se convirtieron en una característica peculiar.
La primera piedra se colocó en el 1163, por deseo del obispo Maurice de Sully, el que adjudicó la obra a un arquitecto aún hoy desconocido. La catedral de la historia de Francia, o catedral de los Reyes, llamada así porque la familia real se refería a esta para todos los acontecimientos importantes, tuvo que esperar 167 años para ser ultimada. Las obras, se alargaron durante más de un siglo debido a los daños producidos durante la Revolución. A pesar de los largos tiempos y de la sucesión de diferentes arquitectos, la catedral, aparece perfecta en sus proporciones y en el equilibrio de los espacios, tanto que no demuestra en absoluto las transformaciones numerosas sucedidas a lo largo de los años.
La catedral gótica más famosa del mundo, sigue siendo una de las metas más visitadas en la capital francesa.Se trata de hecho, de una meta irrenunciable, para todos aquellos que se deciden a visitar París por primera vez, pero también para todos aquellos que no pierden la ocasión de volver a visitarla. Los motivos son numerosos: el primero es que muestra su característica belleza, la perspectiva fascinante regalada a quien la observa desde el puente del Sena (situado a menos de dos pasos) y los relajantes jardines situados frente a la fachada posterior, donde la belleza de sus árboles en flor enmarcan la majestuosa catedral como un cuadro.
El exterior de la catedral: la fachada
En la fachada se apreciará inmediatamente la presencia de tres portales. A la derecha, está situado el más antiguo, el portal St. Anne, representado por una estatua de la virgen en el trono, en el estilo típico del siglo XII, cuando la técnica escultóricase inspiraba en las obras de metal. El portal de la izquierda (también este de la Virgen) y el central, (del juicio), son del 1200 y son estatuas más buscadas y monumentales respecto a la precedente.
Sobre los portales se puede observar la galería de los Reyes, estatuas de los ochocientos, en buena parte destruidas durante la revolución, y posteriormente restauradas por Viollet le Duc y por Lassus. Aún más altas, están situadas las "Galerie des Chiméres", que cierran la fachada alargándose entre las dos torres laterales. Obviamente están presentes también las imprescindibles gargouilles: monstruosas entidades con el deber de proteger la iglesia, a sus fieles y a la ciudad.
Los interiores
El interior, se reparte en cinco altares, se extiende por alrededor de 128 metros de largo, y alrededor de 33 metros de alto. Siete capillas por lado y quince frente al ábside. Absolutamente imprescindible: el maravilloso recinto del trecientos con relieves de un altísimo espesor, la sacristía y el famoso y sugestivo Gran Órgano, con 8000 tubos. Para apreciar lo mejor posible la belleza estructural e histórica del Notre Dame, se aconseja visitarla junto a un guía local. Sólo de esta forma se tiene la posibilidad de saltar la larga cola de la entrada, descubre detalles, secretos y curiosidades de la famosa catedral de los Reyes. Solicita ahora un guía español en París.
